martes, 21 de enero de 2014

LA CABRA TIRA AL MONTE

El nuevo cardenal español Fernando Sebastián Aguilar, considera que la homosexualidad "es una deficiente sexualidad que se puede normalizar con tratamiento".
Preguntado por la homosexualidad, el nuevo cardenal ha indicado que "es una manera deficiente de manifestar la sexualidad, porque ésta tiene una estructura y un fin, que es el de la procreación".
Ha añadido que "una homosexualidad que no puede alcanzar este fin está fallando. Eso no es un ultraje para nadie. En nuestro cuerpo tenemos muchas deficiencias".
En este sentido, Sebastián ha destacado que él padece hipertensión pero que en vez de enfadarse porque se lo digan lo entiende como "una deficiencia que tengo que corregir como pueda".
"El señalar a un homosexual una deficiencia no es una ofensa -ha insistido- es una ayuda porque muchos casos de homosexualidad se pueden recuperar y normalizar con un tratamiento adecuado", por lo que ha sostenido que su posición "no es ofensa, es estima" porque cuando "una persona tiene un defecto, el buen amigo es el que se lo dice".

Las palabras hablan por si solas. Una muestra mas del anacronismo de la iglesia y sus dirigentes. Comparar la homosexualidad con la hipertensión, vamos hombre...
Señor Sebastián, usted no tiene hipertensión, se llama HOMOFÓBIA!!!

Irakurtzea baino eztago. Eliza eta bere buruen anakronismoaren froga bat gehiago. Homosexualitatea hipertentsioarekin konparatzea ere...
Sebastian jauna, hik eztaukak hipertentsiorik,
hirea HOMOFOBIA HUTSA DUK!!!

El nuevo cardenal español Fernando Sebastián Aguilar considera que la homosexualidad "es una deficiente sexualidad que se puede normalizar con tratamiento".
Preguntado por la homosexualidad, el nuevo cardenal ha indicado que "es una manera deficiente de manifestar la sexualidad, porque ésta tiene una estructura y un fin, que es el de la procreación".
Ha añadido que "una homosexualidad que no puede alcanzar este fin está fallando. Eso no es un ultraje para nadie. En nuestro cuerpo tenemos muchas deficiencias".
En este sentido, Sebastián ha destacado que él padece hipertensión pero que en vez de enfadarse porque se lo digan lo entiende como "una deficiencia que tengo que corregir como pueda".
"El señalar a un homosexual una deficiencia no es una ofensa -ha insistido- es una ayuda porque muchos casos de homosexualidad se pueden recuperar y normalizar con un tratamiento adecuado", por lo que ha sostenido que su posición "no es ofensa, es estima" porque cuando "una persona tiene un defecto, el buen amigo es el que se lo dice".

No hay comentarios:

Publicar un comentario