El Juzgado Central número 4 de la Audiencia Nacional ha dejado en libertad provisional al rapero Pablo Hásel tras ser detenido ayer en Lleida. El cantante deberá comparecer los días 1 y 15 de cada mes en un juzgado de su localidad, ya que se mantiene la imputación por enaltecimiento del terrorismo y "descrédito y humillación a sus victimas".
Desgraciadamente no es nuevo el ataque a la libertad de expresión hacia grupos de música u organizaciones culturales que parece ser, tanto molestan al estado "democrático" con el uso de la música y la palabra.
Aurrera!.
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